Nunca antes un argentino había despertado tantas emociones en la NBA. Manu Ginóbili logró lo que pocos jugadores en la historia del deporte: cuando terminó el partido entre San Antonio Spurs y Cleveland Cavaliers, la camiseta número 20 que utilizó durante 16 temporadas fue retirada.
La noche empezó con algo inédito: por primera vez en la historia de la NBA, el himno argentino sonó en un estadio. Y todo gracias a Manu y a su mítica carrera. Michelle Leclercq, oriunda de Tigre, tiene 23 años y desde hace cuatro vive en los Estados Unidos y fue la encargada de interpretarlo.
La ronda de anécdotas de sus compañeros de Selección
Miles de argentinos fueron al AT&T Center para seguir de cerca todos los detalles de una noche llena de emociones. A pesar del partido, lo más importante, esta vez, estuvo en la magnitud del retiro de una camiseta legendaria. Cuando terminó el duelo ante Cleveland, la número 20 quedó colgada en lo más alto del estadio, junto a otras históricas del equipo.
Tan sólo son ocho los jugadores tenían colgadas sus camisetas en lo más alto del AT&T Center: Johnny Moore, Avery Johnson, Bruce Bowen, James Silas, Tim Duncan, Sean Elliott, George Gervin y David Robinson. Manu, ahora, es el noveno.
Estuvieron invitados todos los miembros de su familia y amigos, entre ellos varios jugadores de la Generación Dorada. Pepe Sánchez, Alejandro Montecchia, Fabricio Oberto, Pablo Prigioni, Andrés Nocioni y Luis Scola, son algunos.
El homenaje de DeRozan
DeMar DeRozan le rindió un homenaje particular a Manu Ginóbili. El jugador de San Antonio le pidió a la marca de zapatillas que lo auspicia que le diseñaran un modelo especial, con los colores de la bandera argentina.
Un entretiempo bien argentino
Fabricio Oberto, Luis Scola, Alejandro Montecchia, Pablo Prigioni, Pepe Sánchez, Chapu Nocioni y Gabriel Fernández conformaron -durante el entretiempo- una mesa redonda que condujo Adrián Paenza. Uno por uno, contaron divertidas anécdotas que pintan de cuerpo entero al mejor basquetbolista argentino de la historia.
El momento más emocionante de la noche
Después del partido, Manu entró junto a su mujer y sus tres hijos al centro de la cancha. Ahí, el bahiense escuchó cómo sus excompañeros hablaban de él, incluido el entrenador Gregg Popovich.