Agustín Velázquez, oriundo del paraje Guayquiraró de Esquina, es uno de los 44 seleccionados que habitarán la Residencia Estudiantil que se inauguró este sábado en la ciudad de Corrientes, la cual fue construida por la Fundación Sí gracias a los fondos recaudados el año pasado con el evento que tuvo lugar en septiembre y que los organizadores, los reconocidos productores Cris Morena y Gustavo Yankelevich, lo denominaron ViveRo, en homenaje a su hija fallecida en 2010, la actriz Rominal Yan. Este jóven esquinense estudia Veterinaria y ya convive junto a otros 43 chicos provenientes de diferentes localidades del interior provincial, como así también del Chaco, Santa Fe y Formosa, quienes fueron presentados en la inauguración de dicho edificio.
Cabe recordar que Agustín Velálzquez cursó sus estudio secundarios en la Escuela de la Familia Agrícola (EFA) de Guayquiraró, y ya en 2017 fue noticia cuando se convirtió en orgullo de los correntinos al terminar en el 5º puesto de la disciplina Salto en Largo, de 48 competidores, en los Juegos Nacionales Evita que se realiza en Mar del Plata. Sin embargo ese importante logro no sirvió para mejorar la situación económica de su familia, que justamente no iba a poder solventar los estudios de la carrera universitaria que deseaba el adolescente, hasta que apareció este proyecto de Residencia Universitaria “Romina Yan”, al cual se inscribió y luego de un período de evaluación quedó seleccionado al igual que otros 43 jóvenes.
La primera Residencia Universitaria del NEA abrió sus puertas al público este sábado, en el marco de un emotivo encuentro protagonizado por los estudiantes, quienes como Velázquez comentaron sus experiencias diversas, pero con un denominador común: tienen la gran oportunidad de “cumplir el sueño” de continuar sus estudios. La inauguración contó con la participación de voluntarios de todo el país, el presidente de Fundación Sí, Manuel Lozano, y la presencia especial de Cris Morena, Gustavo Yankelevich, la hija de Romina Yan, Azul Giordano; y los actores Agustina Cherri y Peter Lanzani; dado que la Residencia se fundó gracias a lo recaudado en el megaevento ViveRo, que se llevó a cabo el 5 de septiembre de 2018 en el teatro Gran Rex de la Capital Federal y que se transmitió en vivo por el canal TELEFE, ya que ese día la actriz Romina Yan hubiera cumplid 44 años.
Basta con mirar una sola vez para notar que la residencia universitaria de la Fundación Sí Corrientes tiene una chispa diferente a la de una vivienda común. La decoración naif, los coloridos murales y los carteles con frases alentadoras (extraídas de Chiquitas y Casi Ángeles) parecen tornar real aquellas historias que surgieron de la imaginación de Cris Morena y se transformaron en populares telenovelas. Sin embargo, lo más significativo se está gestando dentro de ese hogar, ya que allí viven 44 estudiantes provenientes de zonas rurales de Corrientes, Chaco, Formosa y Santa Fe.
Universitarios
“Mientras estudiaba para el ingreso a Veterinaria, mi tía (que me estaba manteniendo) se quedó sin trabajo, así que yo tenía que regresar a Goya. Fue entonces cuando un compañero me comentó sobre la Residencia de la Fundación Sí, me anoté, me hicieron el test y acá estoy siendo la última en ingresar a la casa. Estoy muy agradecida porque de otra forma me hubiese sido imposible seguir con la carrera”, expresó a El Litoral Marianela Alvarez.
Por su parte, Carolina Robledo señaló: “Estoy arrancando el curso de Diseño Gráfico y todavía no lo creo. Soy de Mburucuyá, me anoté apenas me enteré de la propuesta y, por suerte, quedé seleccionada. Mi familia está muy feliz porque sin la Fundación no hubiese podido continuar con mis estudios”. Como ellas, muchos jóvenes aprovecharon el acto inaugural para relatar sus experiencias y alentar a otros estudiantes a “luchar por sus sueños”.
Así, por ejemplo, Sabrina, una joven chaqueña que vive en la Residencia Universitaria de Rosario, comentó: “Estoy en segundo año de Ingeniería Industrial. Mi caso es particular, porque cuando llegué a cuarto año se me venía la oscuridad al ver que mis compañeros planificaban lo que iban a estudiar y yo sólo podía decir que lo anhelaba. Fue a mediado del 2017 cuando me enteré de la Residencia, que más que un salvavidas fue un gomón, porque ese sueño se transformó por primera vez en realidad. Sé que eso fue lo que les pasó a muchos de ustedes y quiero decirles que aprovechen cada minuto. Tenemos la oportunidad de cambiar nuestra realidad. No bajen nunca los brazos y gracias a la Fundación eternamente”.
Proyecto
Para poner en marcha la primera Residencia del NEA, los voluntarios de la Fundación Sí recorrieron más de 151 escuelas del interior de Chaco y Corrientes, de donde seleccionaron a unos 300 aspirantes. Luego de realizar una serie de entrevistas, finalmente, se eligió a 44 jóvenes, que ya habitan en el hogar.
La iniciativa fue creada por Manuel Lozano, presidente de la Fundación Sí, con el objetivo de brindar un albergue a aquellos jóvenes que viven en zonas rurales y no cuentan con medios propios para continuar una carrera universitaria. En este sentido, durante el acto el mismo enunció: “Para nosotros esto es mucho más que una casa, es un lugar para equivocarse y volver a arrancar e implica una oportunidad gigante. Pero nada de esto podríamos hacerlo solos”.
Atento al contexto actual, Manuel Lozano expresó: “En estos días se habló muchísimo del índice de pobreza y esta es la mejor forma de combatirla. Brindamos oportunidades reales que permitan la transformación. Las ganas están, depende de los que somos un poco más grandes para que podamos generar esas oportunidades. Gracias profundas a cada uno de los voluntarios y gracias a Cris, Gustavo y Azul, por la confianza que nos dieron al permitir que esta casa llevara el nombre de Romina. Esta casa vino para transformar el dolor en amor y fue lo que vivimos todos”.
En este sentido, Cris Morena dijo a este medio: “Esto es alquimia. Es transformar un sueño, que no sabíamos si se iba a dar, en una realidad. Además, la capacidad de transformación es el impacto social de esta residencia. No sólo cambia a los chicos, sino también a su comunidad”.
Para cerrar, recordó cómo nació el proyecto ViveRo, diciendo: “Sentí que necesitaba hacerle un homenaje a mi hija, después de 8 años de su ausencia, y decidimos realizarlo en el Teatro Gran Rex. Los artistas donaron su tiempo y decidimos que todo lo recaudado fuera a la residencia de la Fundación Sí en Corrientes, y ahora es una realidad. Eso es lo más lindo de todo, así que gracias a todos los que lo hicieron posible”.
FOTO DE ARCHIVO: Roberto Enrique Almirón