Marcelina nació en 1916 en la ciudad de Esquina, Corrientes. Contó que se mudó a Rosario desde muy chica. “Tenía cinco años cuando llegué desde Esquina, Corrientes. Para mí fue lindo porque llegué en barco acá (a Rosario). Trabajé lavando ropa, trabajé en casas de familias, hacía de todo, lo único que no hice fue la prostitución”, develó la mujer.
“Soy de Rosario Central”, comentó. Y pese a que mira fútbol confesó no haber ido nunca a un mundial. “Yo era de trabajar, no era de salir a ningún lado”.
Marcelina tiene cuatro hijos, dos varones y dos mujeres. Al ser consultada sobre cómo se siente cumpliendo 106 años respondió: “Mal, yo no quiero vivir más. Veo sufrir a mis hijas, si no fuese por ellas no sé a dónde iba a ir a parar”. La respuesta incomodó al conductor, aunque de fondo se escuchó a la familia de la mujer diciéndole que estaban felices de tenerla. “Es un ángel”, dijeron.
Finalmente contó una divertida anécdota: “Una vez fue una gitana a pedirme plata para los chicos, le di comida y me dijo `vas a vivir muchos años´…si la encuentro ahora la mando a la horca”, y estallaron las risas de los presentes.
