El hombre con el que se habría casado en secreto Ángel de Brito

Es, sin dudas, una de las mayores curiosidades de la farándula argentina. Ángel de Brito, el periodista que todo lo sabe sobre todos, el que ha desnudado la intimidad de decenas de famosos en la pantalla y las redes, jamás había dicho una sola palabra sobre su vida privada. Hasta ahora.

Dueño de un perfil hermético, De Brito construyó una carrera sólida evitando que su mundo personal se filtrara al público. “Nunca abrió esa famosa puerta”, como muchos dicen. Mientras con rigor profesional se metía en las casas ajenas, la suya permanecía sellada. Ni romances, ni amistades, ni siquiera una pista clara sobre su círculo íntimo.

Algunos datos sueltos sí trascendieron con el tiempo: que es oriundo del sur del conurbano bonaerense —algunos aseguran que es de Lomas de Zamora y otros lo ubican en Luis Guillón— y que simpatiza con Boca Juniors, aunque no es especialmente fanático del fútbol. Y, por supuesto, lo que todos conocen: su impecable trayectoria en los medios, donde se convirtió en el número uno del espectáculo, heredero indiscutido de figuras como Lucho Avilés y Jorge Rial, pero con un estilo propio, basado en la rigurosidad y el trabajo incansable.

“Angelito” —como lo llaman muchos colegas y fanáticos— tiene fama de ser el primero en enterarse de todo. “¿Cómo supiste? ¡Lo sabíamos dos personas nada más!”, suelen preguntarle los famosos, incrédulos. Su respuesta siempre es la misma: trabajo, trabajo y más trabajo. Sin atajos.

El supuesto marido de Ángel con Yanina Latorre

Pero todo cambió en las últimas horas. En un inesperado cruce en la red social X (ex Twitter), Ángel de Brito sorprendió a todos al hablar, por primera vez de manera directa, sobre su sexualidad. Todo comenzó cuando el periodista enfrentó al diputado Fernando Iglesias con un duro mensaje:
“¿Vos me querés enseñar periodismo? ¡Si fracasaste toda tu vida! Te hiciste semi conocido paneleando. Dejá de colgarte de los famosos, dejá el Twitter que no entendés y dedicále más tiempo al Congreso, que para eso TE PAGAMOS ENTRE TODOS. ¡CARADURAAAAAAAAAAAAAAAA!”

La respuesta no tardó en llegar, y desde otra cuenta un usuario le comentó simplemente: “tro lo” (término despectivo con el que muchas veces se alude a la homosexualidad). Lejos de evitar el comentario, De Brito contestó con ironía y contundencia: “Re”, acompañado de tres emojis de arco iris, símbolo universal del orgullo LGBT+.

Con solo tres letras y tres íconos, Ángel de Brito terminó con años de especulaciones. Lo que durante décadas fue un misterio absoluto, se resolvió en una respuesta breve pero elocuente. Sin shows, sin tapas de revista, sin entrevistas exclusivas.