El expresidente brasileño se encuentra en etapa de evaluación clínica tras detectarse lesiones malignas. Fue dado de alta, pero deberá mantenerse bajo control médico.
El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue diagnosticado con carcinoma de células escamosas, un tipo de cáncer de piel de grado intermedio. Así lo confirmó su médico personal, Claudio Birolini, tras la realización de exámenes médicos en el hospital DF Star, en Brasilia.
“No es ni el más benigno ni el más agresivo. Es intermedio, pero aun así puede tener consecuencias más serias”, explicó Birolini en declaraciones a la prensa.
Bolsonaro, de 70 años, había sido hospitalizado el martes tras presentar una crisis de hipo y vómitos, síntomas que se repiten con frecuencia desde que sufrió un ataque con arma blanca durante la campaña electoral de 2018.
El estado de salud actual
Según el diario Folha de São Paulo, la enfermedad fue detectada en una fase precoz. Las lesiones sospechosas fueron identificadas durante un chequeo médico realizado en abril, pero confirmadas recién ahora a través de nuevas pruebas clínicas.
El equipo médico determinó que dos de las ocho lesiones examinadas eran cancerosas: una ubicada en el brazo y otra en el tórax. Ambas fueron removidas quirúrgicamente, lo que evita la necesidad de tratamientos adicionales como quimioterapia.
“Las lesiones ya fueron retiradas, por lo que no será necesario un tratamiento más agresivo. Pero Bolsonaro deberá ser sometido a controles médicos periódicos”, afirmó Birolini.
Además del diagnóstico oncológico, se detectaron problemas renales y anemia, lo que suma nuevas preocupaciones a la salud del exmandatario.
Condenado por intento de golpe
La noticia sobre su salud llega pocos días después de que el Supremo Tribunal Federal de Brasil lo condenara a 27 años de prisión por liderar una organización criminal y promover un intento de golpe de Estado tras perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva.
Debido a sus problemas médicos, Bolsonaro no estuvo presente en las últimas audiencias del juicio, según argumentaron sus abogados.
El expresidente fue dado de alta este miércoles tras permanecer una noche internado en observación. Ahora, continuará con tratamiento ambulatorio y monitoreo clínico.