
Puerto Madryn fue escenario de una nueva cumbre de Provincias Unidas, el espacio político que busca consolidarse como alternativa nacional por fuera de la grieta. El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, ofició de anfitrión y recibió a sus pares Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Claudio Vidal (Santa Cruz), Gustavo Valdés (Corrientes) y Carlos Sadir (Jujuy), además del exgobernador cordobés Juan Schiaretti, una de las figuras clave del armado.
La jornada comenzó con una recorrida por la planta de Aluar, acompañados por su propietario Javier Madanes, y continuó con una reunión política en la que participaron dirigentes de distintos espacios locales.

Los mandatarios insistieron en que el desafío de Provincias Unidas es construir un camino “fuera del péndulo argentino” que, según remarcan, oscila entre “populismos de izquierda y de derecha”.
El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, insistió en la falta de colaboración por parte del Gobierno nacional. “Cuando vamos a Buenos Aires nos ningunean, nos destratan y no nos atienden. Porque somos provincias chicas, pobres, patagónicas o del centro. Permanentemente las provincias son ninguneadas en Buenos Aires y esto tiene que terminar en una Argentina que se tiene que levantar”, sostuvo el mandatario, quien afronta el último tramo de su mandato.